El sol, la luna y las estrellas, alumbrándolo todo.
Comienzan
a acumularse en la superficie del planeta, desde dónde ella podía
divisar la entrada al conjunto de edificios. Llegó a un lugar
concurrido, sin embargo, reinaba la tranquilidad.
Cuándo
marchó del pueblo, fue dura la despedida. Pero él, ya no estaba y
ella, quedó muy sola.
Donde
había llegado veía poca gente en las calles. ¡Qué cantidad de
flores!Todo está muy ordenado.
No
recuerda ¿Sí llegó sola o acompañada? Pasó el trayecto dormida.
No cree que vuelva al pueblo. Miró a su alrededor y dijo: ¡Qué
cosa más curiosa! El sol, la luna y las estrellas alumbrándolo
todo, por lo que, no se ve obscuridad alguna.
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