domingo, 21 de octubre de 2018

No podía creerlo, mi amigo peruano.

En aquel tiempo, aquello,
Nadie se lo podía creer,
Simplemente, 
mirándole a la cara
menos, 
fijándose con detalle,
En su semblante.
...
Mirada sincera de aquel joven,
Cuyo nombre-ahora mismo-
No recuerdo-muy-bien.
¡Pero, en fin! 
¿Qué se le va a hacer?
...
"La papeleta" no ofrecía dudas,
Estaba muy claro-todo-,
Escrito, detallado en el papel,
Documento firmado,
rubricado y sellado,
Por el comandante, también,
Por el teniente coronel.
...
Como así,
Estaba reglamentado
en la normativa del cuartel.
¡Tome, esto es suyo!
Desde-ahora-de su propiedad,
Deberá custodiarlo, 
quedando usted, libre
¡De servicio, excluido total! 
..
¡Gracias! 
¿Está todo listo?
¿Me puedo marchar?
¡Sí, sí! ¡Bien, bien, vale!
Puede irse, todo correcto.
¡Muchas gracias! 
¡Adiós!
..
Cuándo se marchó de aquella oficina,
El oficial que le atendió,
Continuó perplejo,
No podía salir de su asombro.
...
Muy ensimismado, 
Pensó:
¡Qué vida esta!
¡Vivir para ver!

...
¡Sí no lo veo con mis propios ojos!
No lo hubiera podido creer.
Es más, ahora mismo
¿Esto no creo que pudiera ser?
..
¡Bueno!
Archivaré el expediente,
Ya va siendo 
hora de ir a comer.

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