Secuelas de un trágico accidente.

Jenny salió del baño, una vez terminó de secarse. Se puso de nuevo el albornoz y se dirigió a la cocina, donde iba a prepararse un desayuno de película, pues aunque era muy pronto, tenía un apetito voraz, cuándo de repente vio la espalda de una persona en el salón sentada en uno de los sillones. Al reconocerla, no salía de su asombro:

¡Uf mamá qué susto me has dado! ¿Has entrado sin llamar? ¿Qué haces aquí? ¿Es qué no podías haberme avisado antes? De madrugada, entras en una casa con un esmerado sigilo, como cual ladrón, con la intención de realizar su deshonesta actividad, desvalijarla mientras sus ocupantes duermen.

¡Pero hija! Me dejaste unas llaves para cuando no estuvieras y yo necesitara algo. Como vives tan cerca y tienes de todo !Cálmate, por favor! ¿Supongo que no me estás hablando en serio? A estas alturas, confundir a tú madre con un "ladrón"es una sandez, además, encima no he pegado ojo en toda la noche.

¡Mamá, esta vez, cuál es el problema! Por lo que veo, no has encontrado lo que necesitabas.

Pues verás Jenny, no quería despertarte, por eso he esperado a que te levantaras. Ocurre que, tú padre se está comportando muy mal conmigo. Hoy ha llegado más tarde que nunca a casa. No ha querido cenar y sin hablarme se ha ido directamente a su habitación. Esto lo lleva haciendo más de una semana. Me quedé un rato viendo la televisión y antes de irme a la cama, le registre la chaqueta. ¿Sabes lo que encontré?

¡Mamá, por favor, eso no está bien! Parece qué estás "jugando" a policías y ladrones. ¿Dime de qué trata la serie esa qué estás viendo?

¡Lo sé Jenny, que hacer eso, no está nada bien! ¡Pero por favor, escúchame y déjate de series o películas! Lo que te cuento, no es una "historia" de cine, es real. Tú padre, últimamente, no para en casa y cuando está es como si viviera solo. Sale pronto y vuelve tarde: Hola y adiós, es todo lo que hablamos, no compartimos nada, ni un simple comentario sobre qué tiempo va hacer el fin de semana. ¿Tú crees que eso es convivir?

A ver mamá, ¿Qué pasajes son esos? Te acuerdas de lo que has leído. ¿Supongo que los habrás dejado en su sitio?

¡Sí Jenny, sí! Pero es que ya no puedo más. Por eso he venido a pedirte algo de ayuda.  ¡Mamá, tranquila! Debes contarme más detalles de lo ocurrido? Ya sabes que siempre has contado conmigo. ¡Venga, relájate! ¿Quieres una manzanilla? ¡Sí gracias, por favor, no le pongas azúcar!

Iré a prepararla, de paso hago mi desayuno que tengo un hambre de muerte. Dime si quieras algo más. ¡Espera un momento, enseguida vuelvo!

De regreso al salón, Jenny se llevó un nuevo susto, su madre había desaparecido, por lo que, puso la misma cara de asombro que cuando se presentó en su casa.

Bueno Jenny, está bien, por hoy ya has hablado bastante ¡ Ahora siéntate en la silla! ¿Cómo estás? Bien doctora, me encuentro muy tranquila. ¡Así me gusta Jenny! Según vienes comentando, en tus pesadillas, poco a poco, vas soltando lastre o las piedras más pesadas de la "mochila", notándola más ligera. En este sentido, desde la primera vez que viniste, las últimas visiones y pesadillas tienen menos escenas extrañas, además, de ser más cortas y menos impactantes .¿Estás de acuerdo en lo que digo? ¡Sí, sí doctora!

Por tanto, sin duda, estamos ya en una fase con síntomas evidentes de mejora. Aún así, no tenemos que bajar la guardia, por lo que se trata de que la tendencia siga siendo la misma.

A partir de mañana, suprimes la pastilla del desayuno, manteniendo la del almuerzo y la de antes de irte a la cama, O.K? ¡Sí, doctora de acuerdo!Continúa yendo a las sesiones del grupo de terapia de la psicóloga Helen que, sin duda, están siendo de gran ayuda. Te quiero ver siempre, en todo momento, muy entretenida y concentrada en cualquier tarea, en la oficina, en casa, charlando con amigos, haciendo deporte. Nada de estar ensimismada contigo misma ¿ O.K.? ¡De acuerdo doctora!

Te veo el próximo mes, concretamente, el día 25, jueves, a las 18:30 p.m. ¡Ánimo Jenny! Estoy muy satisfecha de cómo estás afrontando todo esto. Continúa luchando que merece la pena. Ya verás, como el desgraciado accidente, aunque no lo olvides nunca,llegará un momento que, dejará de ser una obsesión y ésas pesadillas y falsas apariciones desaparecerán para siempre. Sí antes del día de la cita, notas algo que no va bien, me das un toque y hablamos. O.K ? ¡Qué tengas un buen día! ¡Gracias, doctora, hasta pronto!